jueves, 30 de septiembre de 2010

Muffins de limón y semillas de amapola



Hemos hecho estos muffins que hace poco nos presentó Eva de "Ma Petite Boulangerie". Típicos americanos.
Os tengo que decir que a veces elegimos una receta, invertimos nuestros tiempo y esfuerzo y no siempre merece la pena. He hecho dos intentos con la magdalenas de Xavier Barriga y salen muy ricas pero que si problemas con el tiempo, con la temperatura...la verdad es que de ese libro aún no me ha salido nada realmente bien. Pero con el blog de Eva es distinto, mira que la lista de ingredientes es extensa, pues salieron a la perfección y riquísimas. La única diferencia es que las mías tardaron 30 minutos en vez de los 20 que ella refiere, pero es una mínima diferencia que puede deberse a cualquier cosa y que no cambió para nada el resultado, la magdalena quedó esponjosa y tierna y duró varios días.
El blog de Eva es un paraíso para los que nos gusta usar el horno.

Ingredientes para 12 muffins:
  • 125 g de mantequilla a temperatura ambiente
  • 155 g de azúcar
  • 2 huevos grandes
  • 220 g de harina para todo uso
  • 1 cucharadita de levadura química
  • 1/2 cucharadita de bicarbonato
  • 2 cucharadas de semillas de amapola
  • Ralladura de un limón
  • 1/4 cucharadita de sal
  • 125 g de buttermilk. Pero Eva nos ofrece un sustituto rápido porque esto es difícil encontrarlo por aquí: 125 g de leche entera mezclada con 1 cucharadita de zumo de limón, y que repose 10 minutos.
  • 2 cucharadas de zumo de limón
  • 1 cucharadita de vainilla líquida

Precalentamos el horno a 180º.

Separamos las claras de las yemas. Montamos las claras, con una pizca de sal, a punto de nieve.

Batimos la mantequilla con el azúcar hasta suave, luego añadimos las yemas de una en una.

Unimos los ingredientes sólidos: harina, sal, levadura, bicarbonato, semillas de amapola, ralladura de limón. Sin batir en exceso.

Unimos en dos veces a la mezcla de mantequilla, alternando con el buttermilk. Luego la vainilla y el zumo de limón.

Por último, con la lengua de silicona y con movimientos envolventes unimos las claras.

Lo que nos queda es poner las cápsulas de papel en los moldes, rellenarlos y al horno. Vigilar hasta algo doradas y hasta que metiendo una palillo salga limpio. Eva las tuvo en 20 minutos y a mi me tardaron 30.

Me quedaron deliciosas y de los mejores muffins que han salido de mi horno.


lunes, 27 de septiembre de 2010

Llampuga con pimientos



Si durante toda tu vida has estado haciendo un plato tradicional, tu credibilidad es muy alta. Si vas a innovar nadie te dirá si lo que haces está bien o mal. Lo peor es hacer una tortilla española o una paella valenciana. Entonces siempre encontrarás quien te diga que él es de donde es ese plato y en su tierra es así y... no lleva cebolla, por Dios,...donde se ha visto una paella sin ferradura.

Y ahora llego yo y pretendo hacer una llampuga con pimientos.

La llampuga es un pescado azul, que aparece en septiembre y dura hasta noviembre. Se encuentra en las islas del Mediterráneo, se come en Mallorca, Malta, Sicilia...No son muchos los platos que se realizan con él y este quizás es el más emblemático.

Lo he hecho varias veces y hace unos días ví una receta en un libro de Jaume Fábrega, "La Cuina de Mallorca", era sencilla de hacer y aunque no la hemos seguido al pie de la letra sí que hemos seguido su proceso y nos ha encantado.

Ahora la llampuga está muy barata y puedes cambiarla por otro pescado azul si no te encuentras en la "isla de la calma".




Ingredientes para dos personas:
  • 1 llampuga mediana en rodajas
  • 2 pimientos rojos que rompemos con las manos en trozos grandes
  • 3 ajos aplastados de un golpe con la mano, con su piel
  • 1 ajo picado
  • 2 tomates hermosos y maduros, sin piel ni semillas y picados
  • sal
  • 1/2 cucharadita de azúcar, más según la acidez del tomate
  • pimienta
  • aceite de oliva virgen extra



Cogemos una cazuela de barro y le echamos un buen chorro de aceite de oliva, cubriendo generosamente el fondo.
Cuando esté caliente freímos el pescado, ligeramente salado, sin enharinar. Uno o dos minutos por cada lado.
Reservamos al calor.

Ahora en el mismo aceite sofreímos los pimientos y los 3 ajos aplastados. Tapamos la cazuela, teniendo cuidado de ir moviendo para que no se nos peguen. Y hasta que estén más blandos y con algunos toques tostados. Un poco de sal acelerarán esta parte que es lo que más te va a tardar.

Agregamos los tomates, junto con 1/2 cucharadita de azúcar, el diente de ajo picado y pimienta recién molida.

En unos 10 minutos lo tenemos. Agregamos el pescado y dejamos unos minutos para que todo coja la misma temperatura y los mismos aromas.

En la receta de Jaume Fàbrega usa hierbas de hinojo y un trozo de cáscara de naranja seca. Luego decora con albahaca. Son ideas que puedes tomar pero lo más importante es el sabor de esos pimientos y el contraste con el pescado azul.

Para aligerar el plato hemos acompañado con unas patatas de guarnición que hemos hecho en el micro en 3 minutos y medio. Pinchamos con un tenedor y envolvemos cada una en film transparente.

Hay que aprovechar la temporada de este gran pescado.


sábado, 25 de septiembre de 2010

Pizza de pulpo a la gallega



Con esta receta nos queremos presentar al concurso que realiza nuestra nueva amiga Sara, de "Las recetas de Sara" en colaboración con Aceitevirgen.com. Una iniciativa sana y muy nuestra.

Realmente, no es fácil eligir por el hecho de que un gran porcentaje de nuestra comidas están realizadas con el oro líquido.

Por otro lado, mis domingos son días de pizza y cada vez se nos complica un poco más la elección original del relleno.

Así que reuniendo ideas ahí va nuestra pizza de...sí, sí, has leído bien...de pulpo a la gallega.

Ingredientes para dos personas:
  • 250 de masa de pizza con aceite de oliva virgen extra. Os dejo un enlace de nuestro aquí un recientito vídeo sobre amasar pizza.
  • unas cucharadas de salsa de tomate espesa
  • 1 tentáculo grande de pulpo o dos medianos cortados a rodajas de unos 3 milímetros
  • pimentón dulce de la Vera
  • 125 g de mozzarella
  • un chorro generoso de aceite de oliva virgen extra
Tan fácil como encender nuestro horno a tope. Poner la masa extendida sobre una placa enaceitada. Poner el tomate dejando un borde de unos 2 cm. Cubrir encima con el pulpo. Espolvorear con pimentón. Desmenuzar la mozzarella con las manos y ponerla encima. Un buen chorro de aceite de oliva que caiga sobre los bordes libres de la masa también.




Y colocamos a media altura hasta dorada. La temperatura es muy importante, si tu horno es tímido tardará más tiempo. El mío tarda 10 minutos.

Habría que tener en cuanta otras opciones:
  1. Poner el tomate el queso y meter 5 minutos (o a media cocción), luego el pulpo y meter otros 5. En este caso, no le damos tanta caña al pulpo que ya estaba cocido.
  2. Poner el tomate y meter 5 minutos. Luego el pulpo y el queso. El pulpo no se sobrecocinará y el queso sólo se fundirá, también muy interesante.

Ahora nos queda despedirnos, felicitar a Sara y meternos en la cocina que siempre hay faena.

jueves, 23 de septiembre de 2010

Galletas de colores



Me ha costado pero han salido. Parece que el tiempo te lo va pidiendo y poco a poco vamos acercándonos al horno.

La idea primera era hacer unos botones que habíamos visto en "canecositas", en una receta que anteriormente había visto en "kanela y limón" y ahora os podría cantar la canción de "ya era hora, ahora me toca a mí..."pero, aunque he seguido el consejo de las maestras y la masa y los cuidados son los mismos, en el último momento saqué todos los moldecitos de galletas que tenía y me lié con mis niños a hacer estrellitas amarillas, hipopótamos rosas, perros verdes y corazones turquesas.

Nos salió un platito curioso de textura perfecta y muy ricas.




Ingredientes:
  • 250 g de harina
  • 125 g de mantequilla fría cortadas en cubitos
  • 120 g de azúcar
  • 1 huevo
  • 1 pizca de sal
  • 1 cucharadita de esencia de vainilla

  • colorantes alimentarios
Lo hice a mano uniendo los ingredientes primero con una pala de madera y luego como si trabajáramos una quebrada, al final más trabajo para mí pero el resultado fue el mismo.

Dividimos en 4 partes que coloreamos con algunas gotas de colorante.

Luego envolvemos en un film por separado y a la nevera. Necesité más de una hora, pues estaban aún demasiado blandas para extenderalas y cortarlas con el molde. Las dejé hasta el otro día y entonces no hubo problemas. Las fui sacando de una en una (de color en color), con el rodillo estiramos, cortamos con los moldes y ponemos en la placa con el papel vegetal. Os aconsejo trabajar rápido y no usar las manos para que no se caliente la masa.
En cualquier caso si queréis hacerlas echarle un vistazo a los consejos de "canecositas" y "kanela y limón" que saben más de esto que este aprendiz de pastelero.

Cuando los tengamos todos al horno a 170º hasta que los bordes estén firmes pero el centro aún blandito. A la rejilla.

Las mías eran más gorditas que los botones y tardaron 14 minutos, pero hay que vigilar para que tanto trabajo no se nos estropee.




Qué contento te quedas cuando le haces la foto al platito. Tiene su trabajito pero es gratificante.


miércoles, 22 de septiembre de 2010

Ensalada de lentejas y pulpo


Ayer terminó este verano y aunque ya se acabó por aquí nos hemos marcado una ensalada muy completa que hemos encontrado en un blog de recetas caseras "morasmoradas", aunque nosotros siempre tuneando e interpretando.

Nos ha encantado, potente pero ligera, sabrosa y con los sabores de siempre pero con matices y texturas. Para mí ha sido todo un descubrimiento que hemos dejado medio preparado a primera hora y los hemos terminado luego en un plis plas.
Vamos allá.



Ingredientes para los dos de siempre:
  • 4 patatas medianas
  • 1 tentáculo de pulpo cocido
  • 1 manzana, la que tengas ácida, golden, reineta.
  • 100 g de lentejas pardinas cocidas
  • 1 cebolla tierna picada
  • 1/2 pimiento rojo picado
  • pimentón dulce para espolvorear
  • sal
Vinagreta:
  • 1 cucharada de alcaparras picadas
  • 1/2 cucharadita de pimentón dulce
  • 1 cucharada de vinagre de manzana
  • Aceite de oliva virgen, entre 4-5 cucharadas
  • sal



A primera hora de la mañana cocí las lentejas con una hoja de laurel en agua con sal. También cocimos las patatas en el micro (pinchadas con un tenedor y envueltas en film). Cortamos las patatas en rodajas gruesas y las colocamos en un plato grande o ensaladera donde luego la presentaremos, un poco de sal fina y pintamos con aceite virgen. Tapé con albal.

Preparamos la vinagreta. Unimos los ingredientes. Las alcaparras al picarlas sueltan bastante vinagre con lo que necesitaremos más aceite de lo habitual para mantener la proporción.

Nos queda cortar el pulpo, la cebolla tierna, el pimiento, la manzana en cubos. Mezclamos con las lentejas, luego todo con la mitad de la vinagreta.

Montamos sobre las patatas, ponemos algo de pimentón dulce sobre las patatas que nos quedan a la vista y terminamos echando el resto de la vinagreta sobre todo el conjunto.


lunes, 20 de septiembre de 2010

Amasar una pizza

Os presento junto con mi niña un vídeo casero sin pretensiones por si alguien puede sacar algún partido o para que sirva de referencia para las recetas de pizzas.

Evidentemente, es sólo una opción y yo mismo realizo variaciones cada vez.

Natural, con más fallos que aciertos, sencillo.

Sin más comentarios. Os lo dejo aquí.






Os recuerdo los ingredientes:
  • 200 g de harina de fuerza

  • 50 g de harina d garbanzos, sémola de trigo, harina de maíz, o harina de trigo floja

  • 2 cucharadas de aceite de oliva virgen

  • 1 cucharadita y media de sal fina

  • agua, uso filtrada. Si va a la nevera a temperatura ambiente. Si no y tienes prisas templada

  • levadura fresca. Un cuarto de cubito si haces fermentación lenta en nevera o medio cubito si sube a temperatura ambiente.

Con estas cantidades salen dos pizzas pequeñas (de unos 85 g) y otra para dos personas (250 g).


domingo, 19 de septiembre de 2010

Satay de pollo con salsa de cacahuetes



Es una receta de brochetas que suele venir en todos los recetarios de cocina thai, un clásico.

La salsa de cacahuete suele tener manteca de cacahuete que a veces es algo difícil de encontrar. Pero haremos nuestra salsa con cacahuetes evitando ese bote preparado y el resultado ha sido muy rico.

Así que la receta que os presentamos es algo así como una adaptación de la receta original a los sabores e ingredientes de por aquí, intentando ponerlo todo fácil pero intentando que la brochetita final se parezca a la que solemos comer en los restaurantes thai.

Primero maceramos el pollo, mejor toda de un día para otro aunque puede valer unas horas, y luego haremos la salsa.




Ingredientes para dos personas:

Macerado:
  • 2 pechugas de pollo que compré fileteadas. En este caso, nos vienen bien porque las cortaremos en tiras de 2 cm y así finitas nos ahorran el trabajo.
  • 1 cebolla pequeña en juliana fina
  • 1 diente de ajo machacado
  • 1 cucharada de aceite de girasol u otro neutro
  • 1 cucharada de zumo de limón o mejor de lima
  • 1/4 de guindilla cayena molida
  • 1/2 cucharadita de cilantro molido (podrías cambiarlo por otra especia o 1/4 de cucharadita de mezcla de especias)
  • 2 cucharadas de salsa de soja
  • 1 cucharadita de jengibre fresco picado
Salsa de cacahuete:
  • 50 g de cacahuetes pueden ser crudos o tostados o fritos. Usé fritos y pelados y me fue bastante bien
  • 100 ml de leche de coco
  • 2 ajos picados
  • 1/2 cebolla grande picada
  • 1/4 de canela molida
  • Una pizca guindilla cayena molida
  • 1,5 cucharaditas de azúcar moreno
  • zumo de 1/2 lima o 1/4 de limón



Cortamos en tiras de 2 cm los filetes finos de pollo y dejamos a macerar con el resto de ingredientes durante 24 hora en la nevera.

Al otro día ensartamos formando ondas. Esta forma es ideal por así queda más fina y retiene mejor la salsa que le ponemos, también queda más bonita. La otra opción sería cubos de 2 x 2 cm, más fácil.



Para la salsa en aceite de girasol doramos ligeramente el ajo y la cebolla. Mientras con la batidora unimos los cacahuetes con la leche de coco que incorporamos. Agregamos la canela, la cayena, el azúcar, algo de sal y seguramente agua por que espesará demasiado. Cocer unos 10 minutos.
Volver a batir, probar de sal, azúcar y picante.
Ahora agregamos el zumo de lima (preferible) o limón, mezclamos de nuevo.

Las brochetas sobre la plancha caliente y untada con aceite hasta dorar por ambos lados, es bastante rápido.

Y evidentemente acompañamos con arroz.




viernes, 17 de septiembre de 2010

Spaghetti con calamares


El libro "la cocina italiana de Jamie" lo he aprovechado bien, pero no era mío y lo he tenido que devolver a la biblioteca pública. Con toda la pena de mi corazón porque he sido feliz haciendo sus recetitas y con la publicidad que le he dado no que creo que lo pueda sacar en una buena temporada.

Bromas aparte, lo he disfrutado y todavía hay recetas que he hecho y aún tengo reservadas. Una de ellas son estos espaguetis con un sabor profundo y delicado. Increíble cómo podemos disfrutar con una bandejita de calamares pequeños que no me costó ni dos euros.

Me queda otra receta pero la reservo para el concurso de cocina italiana de Sara que ahora tengo enlazado en la barra lateral, por si os queréis apuntar.



Ingredientes para dos personas a las que se le acaban las vacaciones:
  • 160 g de spaguettis
  • un bulbo hinojo picado en la receta original pero unas pencas de apio sin las partes más fibrosas te valdrían. En otras recetas usan cebolla tierna picada.
  • 1 diente de ajo en láminas finas
  • 1 cucharadita de semillas de hinojo machacadas
  • 1/2 vaso del vino blanco seco, que se pueda beber, así acompañará luego nuestra comida
  • un poco de guindilla roja picada según pique o según toleremos
  • una bandeja de 400 g de calamares pequeños que limpiamos y cortamos en anillas
  • sal y pimienta molida
  • aceite de oliva virgen
  • 5-6 hojas grandes de hierbabuena en tiras, nuestra aportación y dos ramas para decorar
  • ralladura de un limón
Debemos tenerlo todo preparado, todo es rápido y no puede esperar.

En una sartén amplia salteamos el apio (o hinojo o cebolla tierna) con el ajo y las semillas de hinojo durante unos minutos a fuego medio. Añadimos el vino, la guindilla y los calamares y subimos el fuego, removiendo hasta que evapore la mitad. Bajamos el fuego y dejamos cocer lento.

Cocemos la pasta en abundante agua salada hasta al dente.

Probamos la salsa de sal y pimienta y agregamos la pasta, mezclamos.

Retiramos del fuego y añadimos unas 3 cucharadas de aceite de oliva virgen, la hierbabuena en tiras.

Decoré con unas ramitas de hierbabuena pero aún podemos añadir un poco de ralladura de limón, que con las prisas olvidé.

Podemos reservar un poco del agua de cocción de la pasta por si la mezcla te queda un poco seca.

La verdad es que también me podía comprar el libro.




jueves, 16 de septiembre de 2010

Atún encebollado



Hace algún tiempo que no publico ninguna entrada de cocina gaditana y ya tocaba. El atún encebollado aparece en recetarios andaluces pero es en Cádiz y más concretamente en Barbate donde consigue su máximo esplendor.

La tradición de las almadrabas, los recuerdos del mítico garum, el museo del atún, las conserveras, todo un mundo detrás de estos grandes peces. Dicen que los mejores ejemplares se los llevan los japoneses pero los que quedan por aquí no están nada mal.

He buscado la fuentes más gaditanas: "Cocina de la Provincia. Cádiz" una colección que publicó el Diario de Cádiz y me conseguí también en una librería de segunda mano la última vez que acudí por la Tacita de Plata (hace demasiado tiempo) y el mítico libro "Gastronomía y cocina gaditana" de Carlos Spínola. Pero después de empaparme de esta sabiduría he realizado la receta a mi gusto, con los tiempos y los toques que me interesan pero sin perder en nada la idea de este clásico que se come día a día en las casas gaditanas, en los bares de tapas y en los restaurantes más recomendados. La cocina de Cádiz es así, sencilla pero sin renunciar a la gloria bendita.

Ingredientes para los dos de siempre:
  • 350 g de lomos de atún
  • 2 cebollas grandes
  • 4 dientes de ajo en tiras finas
  • 2 hojas de laurel
  • sal y sal maldon
  • un chorro de vino fino. Usamos un montilla- moriles de calidad, más usados en las casas de Cádiz para la comida en vez de otros más renombrados que se usan para beber.
  • aceite de oliva virgen extra



Partimos en trozos grandes la cebolla, veréis en la foto cómo no es ni juliana, ni picada sino que la cebolla se trocea sin mucho cuidado, olvidándonos de lo bien que usamos el cuchillo.
Luego calentamos aceite en mi cazuela de hierro y doramos la cebolla, con el ajo y el laurel, con un poco de sal, a fuego medio tardará tiempo, hay que tener paciencia. Verás que la cebolla está toda dorada y con zonas algo oscuras, aquí es donde queríamos llegar.

Apartamos la cebolla dejando el centro libre. En el centro ponemos el atún en tacos que vamos a marcar, es dorar sólo por dos lados, por arriba y por abajo.

Cuando esté dorado mezclamos con la cebolla, añadimos el vino, volvemos a mezclar, rascamos el fondo y dejamos que evapore.

Cuando haya evaporado casi todo y nos quede una salsita servimos poniendo un poco sal maldon por encima.

Un vino blanco de la denominación de origen "Tierra de Cádiz" sería una compañía ideal. Los sabores del sur pueden entrar en tu casa.


martes, 14 de septiembre de 2010

Ensalada de rúcula y fresas


No teníamos que buscar mucho porque estos dos ingredientes se entienden bastante bien, casan de maravilla. Aún así nos dimos un paseíto por blogsearch y miramos unas cuantas recetas, había bastantes ejemplos, entre ellos esta de Anita Cocinitas.

Por otro lado, Alcantarisa de "Cocinando en mi isla amarilla" me habló de un aliño que publicó hace algún tiempo, para los amantes de la rúcula. Me encantó aunque le añadí un poco de vinagre de frambuesa, gracias: Aceite de rúcula y parmesano.

Así que con un poquito de aquí y algo de allí nos dispusimos a aprovechar esos dos ingredientes y de qué forma.



Ingredientes:
  • 250 g de fresas
  • 100 g de rúcula
  • semillas de amapola
  • 3 círculos de queso de cabra
El aliño:
  • 1 vaso de aceite de oliva 0.4º
  • 1 puñado de rúcula
  • 1/2 vaso de parmesano rallado
  • sal
  • pimienta
  • un chorro de vinagre de frambuesa



Lavamos las fresas y la rúcula. Retiramos el rabito.

En nuestra ensaladera ponemos la rúcula, en el centro las fresas, las más grandes las cortamos por la mitad.

Ponemos algo de queso de cabra desmenuzado.

Espolvoreamos con semillas de amapola.

Aliñamos con esta maravilla que nos han soplado.

Que lo disfrutéis.


lunes, 13 de septiembre de 2010

Copa de yogur y fresas maceradas en vinagre de módena


Lo primero fue que compré unas fresas en Alcampo con una pinta divina.

Lo de siempre son los yogures. Empecé a hacerlos hace años pero desde que nos compramos la yogurtera es mi mujer la que se dedica a mantener el frigo lleno de esos vasitos. Hemos ganado mucho con la yogurtera, al principio( tenemos una primera entrada de la etapa pre-yogurtera de nuestro yogur casero) los hacía en un termo pero no era tan fiable, la temperatura ambiente influía mucho y a veces se nos acidificaban un pelín. En la foto veis mi yogurtera que usamos actualmente.

Con las fresas decidimos hacer una fresas con vinagre, vimos varias aceptables pero cuando encontramos la copa de yogur en afuegolento...entonces fue cuando nos decidimos.




Ingredientes para dos copas:

  • 250 g de fresas cortadas a lo largo en tres láminas
  • 1 cucharadita de crema de vinagre de módena
  • 8 cucharaditas de azúcar
  • 2 yogures naturales caseros ligeramente edulcorados. La receta la tenemos en otra entrada anterior: copa yogur con moras

En un bol. Después de lavar y cortar las fresas las ponemos a macerar con la crema de vinagre y el azúcar. Mezclamos bien. Cubrimos con un film y dejamos en la nevera durante una hora. Soltarán un jarabe delicioso que no sabe para nada a vinagre.

Luego montamos las copas. Primero yogur, luego fresas con un poco de su jarabe, otra capa de yogur y terminamos con fresas y jarabe.




Servimos. Sugerimos meter la cucharita hasta abajo para que recoja todos los sabores en el camino hacia la superficie.


domingo, 12 de septiembre de 2010

Tallarines con rúcula y gambas



En este blog no nos planteamos cuales serán nuestras próximas publicaciones, no tenemos previstas...publicamos tal cual lo sentimos, somos puro corazón. Por eso cuando tocamos un tema que nos gusta repetimos. Te puedes encontrar 5 entradas de panes seguidas, llevamos el verano con los pescados, los domingos tenemos la pizza.

Y ahora nos está dando por la pasta, es lo que más nos apetece y así lo comemos. También estamos sacando una receta tras otra de "la cocina italiana de Jamie".

Cuando vi esta receta me pareció fácil pero algo barroca, aunque me gustaba. Esta mañana me levanté si saber qué hacer de comer, sin una idea fija pero muchas en el aire y al final me decidí por esta maravilla.

En el mercado conseguí una rúcula selvática, que al comerla en crudo picaba, una delicia. Recuerdo cuando conocí esta hierba en Roma, hace unos añitos en un viaje de calor sofocante, ahora la tenemos en todos los supermercados. Junto con las gambas son las protagonistas del plato, aunque tiene muchos otros sabores.



Ingredientes para los dos de siempre:

  • 160 g de tallarines
  • sal
  • 1 ajo muy picado
  • 2 buenas pizcas de guindilla picada. Usé un ají molido que son guindillas en escamas con sus semillas y todo
  • 400 g de langostinos, que pelamos
  • 3 tomates secos en aceite para hacer en la batidora algo más de una cucharada de puré. Si no lo encontráis aquí podéis ver cómo lo elaboramos en otra ocasión.
  • 1/2 copa de vino blanco
  • 2 manojos de rúcula bien fresca
  • pimienta
  • zumo de 1/2 limón
  • ralladura de un limón


Cocemos la pasta en abundante agua con sal, en una olla de paredes altas y a fuego fuerte. Es decir, como siempre.

Luego en una sartén grande con aceite que nos cubra el fondo rehogamos un ajo, junto con la guindilla. Cuando empiece a dorarse agregamos las gambas hasta que cambien de color.

Añadimos el puré de tomates secos y el vino y dejamos reducir unos dos minutos. Si vemos que se seca mucho podemos añadir un poco del agua de los tallarines. Salpimentamos.

Unimos con los tallarines escurridos, el zumo de limón y la mitad de la rúcula. Mezclamos.

En el plato decoramos con el resto de la rúcula y la ralladura de limón por encima.


Simplemente una delicia.

viernes, 10 de septiembre de 2010

Atún con vinagreta


Después del éxito que en mi casa tuvieron las "gambas en brocheta con vinagreta" prometí una segunda parte. Y aunque algunas voces reclamaban más gambas no pude resistirme a probar una nueva y fácil combinación y así hemos vestido este lomo de atún con una camisa a rayas para que disfrute de este bonito día de verano.

Esta será otra de esas entradas sin enumeración de ingredientes.

Los elementos del plato de verano serán la vinagreta, un trozo de lomo por persona de atún, y brécol, un brécol de 500 g fue más que suficiente para los dos de siempre.




Elaboración:

La vinagreta aunque la hemos mantenido en el frigo (ya llevaba dos días) la sacamos por la mañana para que no estuviera fría al ponerla sobre el pescado.

El lomo lo pintamos de aceite de oliva virgen y lo tiramos en la plancha caliente, marcándolo por los dos lados.

El brécol nos gusta crujiente. Cocimos los arbolitos cortados en agua con sal y unas gotas de vinagre de frambruesa durante solo 3 minutos. Cortamos la cocción bajo el chorro de agua fría. Luego en el último momento ponemos en una sartén amplia aceite y un ajo picado, cuando empieza a dorar salteamos 2-3 minutos más el brécol.

Montamos el plato. El atún un poco de sal maldon, una cucharada muy generosa de vinagreta encima y el brécol salteado al lado. Más vinagreta en salsera por hará falta.




jueves, 9 de septiembre de 2010

Tortilla de patatas y mucha verdura


Una simple tortilla de patatas que hago para aprovechar los tallos de espárragos que me quedaron de la receta de ayer, que aquí no se tira nada. Mucha verdura y mucho sabor para un pintxo, cena, comida veraniega, fiesta o buffet.

Ingredientes para una tortilla grande:
  • 2 pencas de apio sin las fibras y picadas
  • un manojo de espárragos trigueros (sólo los tallos, eliminando la parte más fibrosa, porque las puntas las usé ayer con los spaguetti)
  • 1/2 bandeja de setas de cultivo partidas en trozos
  • 1 pimiento rojo
  • 1 pimiento verde, ambos cortados la mitad en tiras finas cortadas a lo largo, y la otra mitad picados
  • 1 puerro pequeño en rodajitas
  • perejil picado
  • un majado de 3 dientes de ajo, sal y media cucharadita de comino.
  • 5 patatas medianas en cubitos
  • 7 huevos grandes
  • sal
  • aceite de oliva



En aceite de oliva rehogamos los pimientos, espárragos, setas, puerro, apio y sal hasta que las setas pierdan el agua y los pimientos pierdan la entereza, un rato vamos. Reservamos.

Ahora necesitaremos más aceite de oliva porque vamos a cocer-freír las patatas, algo así como confitar. Hay a quien le gusta la patata algo dorada, lo conseguirás subiendo el fuego al final de la cocción.

Añadimos las patatas a las verduras reservadas.

Batimos los huevos con sal y el majado preparado (marca de la casa en las tortillas) en un bol. Mezclamos todo, huevos y verduras.

Con un poco de aceite formamos un tortilla. Cuajamos por un lado, damos la vuelta y doramos, que nos quede jugosita.

miércoles, 8 de septiembre de 2010

Spaguetti con gambas y espárragos trigueros



Otra de pasta con nata, con una gambitas y unas puntas de espárragos. Pero muy fácil y rápido.

Ingredientes para los dos de siempre:
  • 160 g de spaguetti
  • 1 cucharada de mantequilla
  • 14 langostinos, 12 pelados y 2 sin pelar
  • las puntas de un manojo de espárragos (los tallos los reservamos para otra receta, mañana en una tortilla, por ejemplo)
  • 100 ml de nata de cocinar, 22% de materia grasa
  • sal
  • pimienta recién molida



Cocemos la pasta en abundante agua con sal. Hasta que estén al dente.

Mientras salteamos las puntas de espárragos en la mantequilla unos dos minutos, incorporamos todas las gambas hasta que cambien de color.

Bajamos el fuego y agregamos la nata, salpimentamos.

Cocemos un poco para integrar los sabores, sin que llegue a hervir y probamos de sal y pimienta.

Escurrimos la pasta aunque no demasiado y en la misma olla unimos con la salsa preparada.
Mezclamos bien. Colocando por encima esa gamba que no está pelada que me dejo para el final (permitidas manos).

Servimos inmediatamente en platos preferiblemente calentados.

Otra receta de "El libro de la pasta" de Paloma Gómez Borrero. Una nueva forma de disfrutar de la pasta.


martes, 7 de septiembre de 2010

Pizzitas de cebolla roja, gorgonzola y salvia



Y el Domingo para variar: pizza. Me levanto y después del desayuno me pongo con mi masita, ya creo que puedo hacerla con los ojos cerrados, a veces como hoy me confío y me paso de agua. La arreglo y la meto en la nevera para que suba lentamente.

Nos vamos al parque y al volver manos a la masa.

Es una rutina, una maravillosa rutina. La saco del frigo, separo y peso la bolas. Ahora las dejo un poco a temperatura ambiente para que recuperen temperatura. Mientras voy cortando y colocándome los ingredientes, preparando una ensalada, enciendo el horno.

Las dos pizzas de los niños. Hoy querían un "número uno" y el otro no me dijo nada así que le hice un "cículo" (así lo dice mi niño de 3 años).

Luego viene la de los papás y hoy tenemos un idea preparada. Ayer decidí que con el gorgonzola que me compré el otro día, con la cebolla roja y... me faltaba la salvia y fuimos al Corte Inglés, un paseíto, haríamos este pizzitas tan chulas.

El libro que estamos explotando al máximo lo conseguí hace muchos años en una tienda de libros de segunda mano, en Cádiz. Quien me iba a decir que el libro que conseguí más barato iba a ser con el que haría más pizzas, comenzaría a hacer foccacias y me enseñaría a hacer pasta fresca. "Pasta & Pizza Presto" de Maxine Clarke y Shirley Gill.




Ingredientes:
  • aceite de oliva aromatizado con ajo
  • 1 cebolla mediana roja en juliana fina
  • 180 g de gorgonzola, eliminando los bordes y cortado en cubitos
  • 2 dientes de ajo en tiras finas y delgadas
  • 2 cucharaditas de salvia fresca picada
  • pimienta negra

Dividimos la masa en cuatro círculos, extendiéndolas con las manos, no usé el rodillo.

Colocamos en la placa del horno ligeramente enharinada. Pintamos con aceite de ajo.

Ponemos la cebolla, encima el queso. Luego las tiritas de ajo y encima la salvia.

Pimienta negra recién molida y un chorrito más de aceite de ajo.

Al horno a tope, posición media, hasta dorada.


Los autores cuentan:" estos ingredientes combinan la fuerza del gorgonzola con el sabor rústico de la salvia y la dulzura de la cebolla".

Vamos que rica está un rato.

lunes, 6 de septiembre de 2010

Gambas en brocheta con vinagreta


Hemos hecho una brocheta de gambas con una salsa vinagreta que con variaciones encontramos como pintxo en afamados bares vascos, como vemos en una fantástica versión en el blog de Locadebarna,"miblogdepintxos".

Nuestra versión fue otra, sobre todo, porque no teníamos todos los ingredientes en ese momento. Optamos por la de un libro pequeñito pero matón "recetas sencillas, para novatos y cocinillas, del laboratorio de Arzak" de Xabier Gutiérrez. El la llama gambas en brocheta.

Dependiendo de la cantidad de gambas y del pan en que lo presentas puede ser un pintxo o convertirlo en una cenita ligera que nos encantó.


Ingredientes para dos personas:
  • 1/2 kilo de langostinos descongelados y pelados
  • 1/2 cebolla grande picada
  • 1 zanahoria mediana picada
  • 1 pimiento verde picado
  • 1 puerro pequeño picado
  • perejil picado
  • 100 ml de aceite de oliva virgen extra y un poco más para pintar las gambas.
  • 35 ml de vinagre de manzana
  • 4 rebanadas finas de pan de pueblo no muy grandes (usé pan moreno mallorquín)
  • sal fina y sal maldon
Mezclamos el vinagre con la sal y batimos, añadimos el aceite y volvemos a batir. Incorporamos la verdurita picada y mezclamos, probando el compuesto, puede que necesites más sal o vinagre. Nos tiene que quedar una vinagreta bien espesa, aunque cubierta por el líquido.



Ensartamos las gambas repartiéndolas en 4 brochetas de madera.

Tostamos la rebanadas sin que se nos doren en exceso.

Calentamos bien la plancha. Salamos ligeramente las gambas y pintamos de aceite de oliva. Un minuto por cada lado, que cambien de color y adquieran un leve dorado.

Montamos en la bandeja a presentar. Pan, encima brocheta, un poco de sal maldon sobre las gambas, encima una cucharada generosa de vinagreta espesa. Servimos con el resto de vinagreta para quien quiera un poco más.

Os sobrará vinagreta pero se conserva bien en la nevera y es ideal para usar de la misma forma con pescado. Tengo pendiente usarla con atún a la plancha.


domingo, 5 de septiembre de 2010

Pasta con crema de aceitunas



Una pasta con un sabor intenso de aceitunas, con tomates, albahaca. Es una concentración de sabores del mediterráneo.

La he sacado de "El libro de la pasta" de Paloma Gómez Borrero, la que nos daba las noticias desde el Vaticano, y no la había probado antes.


Ingredientes para los 2 de siempre:
  • 180 g de penne ricce, marca Agnesi
  • 3 cucharadas de pan rallado y algo más para servir.
  • 3 cucharadas de queso parmesano rallado
  • 2 cucharadas de mantequilla
  • un buen chorro de aceite de oliva virgen
  • 2 tomates maduros sin piel
  • 4 hojas de albahaca y algunas para decorar
  • 100 g de aceitunas ó 50 g si las pesas sin hueso. Verdes, mitad aliñadas Hacendado, mitad trencades de Mallorca. Puedes elegirlas al gusto.
  • sal y pimienta

Hemos variado la receta aunque no sustancialmente. Mantenemos algo de mantequilla que era la grasa original de la receta, hemos usado otra pasta en vez de spaguettis y aumentado la proporción de salsa.

Lo que da más trabajo es deshuesar las aceitunas. Luego las trituramos.

Rehogamos en la mantequilla y el aceite los tomates picados con la albahaca también picada. Dejamos lento 5 minutos y luego añadimos el pan rallado y la aceituna triturada. Seguimos rehogando durante 3 minutos más, removiendo sin parar. Salpimentamos.

Cocemos la pasta al dente con sal.

Escurrimos y rehogamos la pasta en una sartén grande junto con la salsa de aceitunas y el queso rallado durante 2 minutos más.

Algo más de queso para servir.