Volvemos a la simplicidad: una buena masa base, una salsa de tomate espesa, un ingrediente sabroso, mozzarella y orégano. Esta es la idea básica que se repite hasta la saciedad en este blog. Y es la comida que comemos en casa, nuestro almuerzo de los domingos, que con cariño comparto con vosotros.
Cuando comenzamos el blog lo más importante para mí era la masa, estaba en plena fiebre panera y la cobertura era secundaria; luego fuimos instalándonos en nuestra querida masa con harina de garbanzos y centrándonos en nuestro relleno. Pero esto no quiere decir que no vayamos a cambiar de masa, ni mucho menos, ni que diga que la mía me llena tanto que no voy a cambiar. Es más, hoy admito que es necesario cambiar, porque es mejorable.
Y como me gusta esto de los panes utilizaba la harina de fuerza, ahora me he dado cuenta que para pizzas, lo mismo que para empanadas es mejor la de todo uso. Esa harina que no es la de repostería, ni la de fuerza: y esto porque tiene menos gluten (en el paquete veremos que tiene menor proporción de proteínas que la de fuerza) y conseguimos una masa mucho más manejable y flexible. Así que hemos hecho este pequeño cambio para mejorar nuestra masa.
Como he hablado de panes aprovecho para promocionar el roundup del WBD 2001, el evento del día mundial del pan al que me presenté con mis chapatitas y al que nos presentaron bloggers de 30 países con 263 panes.
Además le doy las gracias a Thermo de "Olor a hierbabuena" que no hace mucho me mandó un vídeo maravilloso en el que Ibán Yarza nos hacía pizzas en Robinfood, os lo recomiendo porque el este hombre se explica muy bien, espero que pronto haga ese pizza turca, a la que ya le tenía echado el ojo.
Ingredientes
250 gr de masa para pizza, usamos la de otras veces pero cambiando la harina de fuerza por harina de trigo normal
unas cucharadas de salsa de tomate espesa, compro una que se llama "salsa napolitana"
un trozo de chorizo de pavo, muy rico y bajo en grasas
1 bola de mozzarella fresa de 125 gr.
orégano
Tras amasar la masa, doblar su volumen, volver a amasar brevemente y estirar con el rodillo en una superficie ligeramente enharinada, la pasamos a la placa del horno enaceitada.
Extendemos el tomate, dejando un buen borde libre, cortamos rodajas de chorizo de pavo y colocamos estratégicamente, luego desmenuzamos la mozzarella con las manos y espolvoreamos el orégano seco.
Metemos en el horno a tope, en posición media hasta que se dore.
Además quiero presentar esta pizza al concurso que presenta "Pan y Peter" un blog diferente. que espero que visitéis, y con una concurso original: "Ilustramos tu receta". Aún quedan unos días para presentar tu receta.
Espero que os guste la simplicidad.
Un abrazo.