Conpanypostre os desea feliz año nuevo

Antes de que empiece a terminar mis platos en la cocina para que esta noche esté todo a punto, quería acordarme de todos aquellos que han acudido a este sitio en algún momento. Es verdad, que últimamente no vengo por aquí todo lo que me gustaría pero el año no ha sido nada fácil. Nos han pasado demasiadas cosas pero aún seguimos por aquí, luchando y echando de menos a otros.

Y es que le tengo mucho cariño a este blog, y por muchos motivos. Es una forma de mantenerme en contacto con muchas personas, es una forma de comunicarme y también de compartir algunas recetas que aprendo y que voy experimentando en mi cocina. Son muchas recetas las que llevo publicadas y os tengo que decir que a veces vuelvo a mi blog para buscar algunas de las que ya no me acuerdo y de las que me queda solo un vago recuerdo. Realmente he conseguido que sea mi cuaderno de trabajo, un lugar donde he guardado mi recetas mas preciadas. Mi deseo es que también os sirva a vosotros y disfrutéis de este trabajo que poco a poco se ha convertido en algo grande.

También os quería hablar de lo que ha veces llamo el "efecto terapéutico de la cocina". Cocinar para mi es algo que está siempre conmigo, en los malos y en los buenos momentos, cuando cocino mi mente está trabajando y está creando. Esos momentos para mí son terapéuticos y creo que nunca renunciaré a ellos, y espero que a este blog tampoco.

No olvidar también a todos los amigos que he conocido no solo virtualmente sino también en carne y hueso en la cocina o por la cocina.

A todos, un abrazo, un beso y el deseo de que sigamos viéndonos, que sigamos disfrutando y que todos esos proyectos que tenemos en nuestra cabeza se vayan cumpliendo.

Feliz Año y un besote desde conpanypostre.

Marmita de bacalao

Hoy os pongo otro de esos guisitos con patatas  que hago tanto en casa. Un buen refrito, a veces un poco de caldo, a veces un majado y el ingrediente protagonista. Hoy el protagonista es el bacalao y nos hemos basado en una receta de un libro especializado en el tema, "La cocina práctica del bacalao, 100 recetas inolvidables"y editan Keinu y Barrena.

Ahora es fácil conseguir bacalao en su punto de salazón con lo que podemos hacer este plato cualquier día del año sin tener que preparar la receta (me refiero a desalar el bacalao) con antelación.
Que lo disfrutéis.

Rehidratamos dos pimientos choriceros secos. Hemos calentado agua en un cuenco y luego hemos añadimos los pimientos y hemos dejado hasta que esté hidratados, también los podríamos escaldar. Luego los partimos en dos y "rascamos la carne" con un cuchillo o una cuchara. Reservamos.

En nuestra olla de fondo grueso con un poco de aceite doramos el ajo fileteado con una hoja de laurel.
Añadimos la cebolla y el pimiento verde picados y seguimos pochando a fuego lento.

Cuando lo tengamos bien pochado añadimos 2 patatas cascadas y dejamos rehogar un poco durante 5 minutos. Calentamos 500 ml de agua mientras.

Añadimos el agua y llevamos a ebullición. Dejamos muy lento hasta que la patata esté blanda.

Añadimos el bacalao desalado, comprobamos que retome el punto de ebullición, tapamos y apagamos el fuego. Dejamos que el bacalao se cocina con este calor residual durante 10 minutos. Luego probamos de sal (puede que no necesitemos porque bacalao ya habrá aportado la suya).

Ingredientes

2 pimientos choriceros secos

1 diente de ajo fileteado

aceite de oliva virgen extra para rehogar

1 cebolla pequeña picada

1 pimiento verde picado

2 patatas cascadas

390 gr de bacalao desalado

¿sal?

Podríamos darle un poco de toque picante poniendo una guindilla cayena al principio.

Espero que os guste. Un besote.

Caprese, de nuevo

 Cumple en casa y de nuevo recurrimos a un clásico, la torta caprese. Que no tiene harinas, que no sube con levaduras y a la que esta vez hemos rebajado un poco la cantidad de mantequilla y de azúcar. La hemos convertido en menos pecado, y la hemos puesto bonita, como se merece.

Es fácil de hacer y luego lo único que nos queda es la imaginación para decorar. Como veréis nuestros trucos están al alcance de todos.

 Ingredientes

200 gr de chocolate 85%

150 gr de mantequilla, mejor a temperatura ambiente

5 huevos a temperatura ambiente

pizca de sal

150 gr de azúcar

1 cucharadita de esencia de vainilla

150 gr de almendras molidas

50 gr de surtido de frutos secos (anacardos, almendras, avellanas, cacahuetes), molidos grueso, en mortero

chocolate para fundir

crocanti de almendras 

azúcar glas

Así la hicimos

Encendemos el horno a 200 gr arriba y abajo.

Fundimos el chocolate negro en el micro (primero un minuto, mezclamos y luego en tandas de 30 segundos y mezclando cada vez, hasta que estén totalmente fundido). Añadimos la mantequilla y homogeneizamos, a la vez que se enfría.

Separamos las claras de las yemas. Batimos un poco la yemas. Las claras las batimos con la pizca de sal y un poco de la azúcar que ya tenemos pesada. Hasta punto de nieve firme.

A la mezcla de chocolate le añadimos las yemas poco a poco, luego el azúcar, luego la esencia de vainilla. Después las almendras molidas y el resto de frutos secos molidos en el mortero.

Mezclamos hasta homogeneizar la mezcla con el chocolate.
Luego lo unimos con las claras montadas. Con mucho cuidado y solo con movimientos envolventes. Hasta que todo esté bien unido.

Preparamos un molde. Me gusta poner en el fondo de un molde desmontable un círculo de papel vegetal y lo unto todo con mantequilla. Hemos usado el de 23 cm.

Vertemos la mezcla en el molde.

Metemos en el horno en una posición intermedia-baja. Dejamos 10 minutos a 200º y luego bajamos a 160º hasta que esté hecho. Nosotros lo dejamos 30 minutos más.

Dejamos enfriar en el molde antes de desmoldar.

Para la decoración fundimos chocolate y pintamos los lados del bizcocho y un poco la superficie. Luego "pegamos" en él nuestro crocanti. Por los lados y un poco por encima del bizcocho.

Cubrimos con azúcar glas, para ello nos ayudamos de un colador para distribuir mejor.

Ponemos unos barquillos rellenos de chocolate.

Pintamos papel vegetal con chocolate fundido, le añadimos un poco de crocante y dejamos que se seque (será más rápido en la nevera). Luego separamos del papel vegetal y rompemos en trocitos que nos van a servir para decorar.

Espero que os guste.

Un besote.

Arroz al vino, un arroz de andar por casa

Hola de nuevo, hoy os quiero dejar un arroz muy fácil de hacer, con pocos ingredientes y con mucha versatilidad. Lo hicimos con un poco de lomo de cerdo pero podíamos cambiarlo otro ingrediente de tu gusto.

Lo más importante ha sido hacer un buen refrito, esta vez con su vino, le hemos dado también un poco de sabor a la carne, macerándola; hemos hecho un majado con ajo y especias, esta vez las de siempre, comino y orégano; y hemos usado un buen arroz de calasparra.

Nos ha quedado un arroz en su punto y algo jugoso. Ideal para una comida de domingo con la familia y sin liarnos demasiado.

Cómo lo hice

Cortamos la carne en dados, frotamos con un diente de ajo majado o pasado por el prensaajos, pimienta recién molida y agregamos un chorrito de vino, dejamos macerar, al menos, media hora. 

Hacemos un majado con 2 dientes de ajo, un poco de sal gorda, orégano y semillas de comino.

En una cazuela de fondo grueso, con un fondo de aceite de oliva, rehogamos a fuego lento la cebolla junto con la judías verdes y el pimiento rojo. Cuando la cebolla esté transparente agregamos un buen chorro de vino blanco y lo dejamos reducir a fuego lento.

Cuando evapore, subimos el fuego y en una parte o en el centro ponemos a dorar un poco la carne escurrida de la maceración (reservamos el líquido de maceración, que utilizaremos más tarde). Cuidado que la carne puede dorarse en exceso, solo que tome un poco de color. Unimos todo, añadimos el arroz y lo rehogamos (puede que necesitemos algo más de aceite de oliva).

Entonces agregamos agua caliente (en relación 4:1 de agua por volumen de arroz), el majado, el líquido de maceración de la carne y la cúrcuma, llevamos a ebullición y dejamos cocer a fuego medio-bajo durante 18 minutos. 

Probamos de sal. Dejamos reposar unos pocos minutos y listo.

Ingredientes para dos personas

2 lonchas de lomo de 1 cm aproximadamente, retiramos grasa visible y cortamos en dados

1 diente de ajo pasado por prensaajos o majado

unas vueltas de pimienta recién molida

un chorro pequeño de vino (usamos Montilla-Moriles)

2 dientes de ajo

1 pizca de sal gorda

1/2 cucharadita de semillas de comino y 1/2 de orégano seco

Unas cucharadas de aceite de oliva virgen extra para rehogar

1 cebolla pequeña picada

12 judías verdes planas cortadas en trozos de 2 cm

1/2 pimiento rojo en cuadritos pequeños

sal

5 puñados de arroz tipo calasparra (podéis usar otro a vuestro gusto)

un buen chorro del mismo vino, más de medio vaso de agua

1/2 cucharadita de cúrcuma

Espero que os guste.

Un besote.

Papas con almejas en ajopollo

 
Después de la receta de ajoharina (Ajoharina de pavo al aroma de hierbabuena), que descubrimos gracias a Enrique Sánchez y su programa "Cómetelo" en Canal Sur, ahora nos hemos liado con esta otra de ajopollo. El ajopollo es una salsa que se hace con pan que hemos frito, almejas y ajo, majándolos.
Nos hemos basado en una receta de uno de nuestros libros preferidos "La cocina gitanas" de Matilde Amaya.
Deciros que el ajopollo pertenece a la cocina de Almería y Granada y esta es una de sus versiones más conocidas, con patatas.
En esta ocasión esta salsa la uniremos a unas patatas y a unas almejas.

El resultado es un sabroso plato de cuchara espeso y que hemos hecho con pocos ingredientes y que podemos conseguir con facilidad. Es en realidad un plato de siempre pero que tenemos que recuperar.

Aunque podamos pensar que es demasiado calórico nada más lejos porque solo usamos unas cucharadas de aceite en la sartén que incluso nos sobrará y no se usará todo.

Lo veo, aparte de rico, bastante equilibrado y sanote.

Ingredientes para dos personas

4 patatas medianas

1 tomate madura pequeño

1 hoja de laurel

aceite de oliva virgen extra

2 rebanadas de pan

4 ajos en láminas

1 puñado de almendras crudas

4 dientes de ajos pelados y enteros

7 pimientas negras

1 sobre de azafrán molido

sal

1/2 kilo de almejas que han estado en remojo en agua con sal durante 1 hora

Como lo hice:

Primero ponemos las almejas en remojo con sal, cubiertas de agua.

Ponemos una tartera con agua que las cubra, un tomate mediano con una corte horizontal y las patatas chascadas. Sal

Dejamos que cueza a fuego lento durante algunos minutos a fuego lento. 

En una sartén con un fondo de aceite de oliva freímos las rebanadas de pan hasta que esté dorado, las añadimos a la tartera, seguimos en la sartén dorando el ajo laminado hasta dorar. Lo añadimos también a la tartera.

Seguimos en la sartén y doramos ahora las almendras, cuidando que no se nos quemen y cuando las tengamos las añadimos al mortero junto con los ajos enteros pelados, las pimientas, el pan que ahora estaba en la tartera y el tomate al que le quitamos la piel. Majamos.

Cuando las patatas estén listan agregamos el contenido del mortero, un sobrecito de azafrán, vamos probando de sal, mezclamos. Por fin, añadimos las almejas y tapamos.

Cuidar que no se nos pegue el guiso, que se vuelve espeso. Cuando las almejas estén todas abiertas y las patatas bien blandas podemos volver a probar de sal  y el guiso ya estará listo.

Que lo disfrutéis.

Un besote.