Una receta de risotto bianco, un risotto base al que le hemos dado sabor de coliflor. La coliflor se lleva muy bien con los lácteos como bien sabéis sus amantes, con la bechamel, con la nata, con el queso.
Pero todo no queda ahí, no podía ser tan fácil. Hemos espolvoreado nuestro arrocito con un pangrattato. En este pan caso uno de anchoas, muy fácil, que aporta nueva textura y un nuevo aroma.
La receta es de Jamie, ese libro del que ya he hecho muchas recetas, "La cocina italiana de Jamie" y que después de sacarlo y renovarlo muchas veces de la biblioteca pública mi mujer terminó regalándomelo.

Sobre el risotto básico haré referencia a otra de mis entradas, donde cuento cómo lo hago.
La variación en este caso consiste en pone las flores de media coliflor en el caldo cociendo desde que empezamos el sofrito. Los tallos bien picaditos formarán parte del sofrito con la cebolla y un ajo picados.
Vamos incorporando primero el caldo y a media cocción del arroz empezamos a incorporar también la coliflor que ya estará cocida. Vamos aplastándola un poco, ya en el arroz, con el cazo.
Para hacer el pangrattato unimos en el túrmix, robot o picadora dos puñados de pan duro, una lata de anchoas con su aceite y guindilla roja al gusto (entre una y tres). Molemos y luego doramos el compuesto en una sartén con un poco de aceite de oliva virgen. Cuando esté bien dorado y sueltecito apartamos.
Terminamos nuestro risotto apartándolo del fuego cuando esté al dente y le añadimos como otras veces la mantequilla y el parmesano. Esta vez también le pondremos un poco de perejil para darle algo de color. Mezclamos.