martes, 30 de noviembre de 2010

Croquetas de pollo, hierbabuena y caldo casero



Esta cosa tan rica que estáis viendo es una croqueta que hemos hecho siguiendo un libro de esos a los que les tenemos mucho cariño. Un libro de recetas recogidas por el "Centro de estudios e investigaciones de Paterna. El Alcaucil" y que se llama "Guisos populares en la Janda interior", en la provincia de Cádiz, es decir, recetas de señoras que cocinan de forma muy tradicional y muy bien y que se han dignado a transmitirnos toda esa sabiduría.

He usado los consejos de dos de sus recetas para hacer la mía propia. Es una receta de aprovechamiento del "puchero" en la que utilizamos pollo. Además no es una bechamel clásica ni mucho menos, mucho más rápida de hacer, y en la que no usamos leche sino el caldo del puchero, una textura distinta, delicada y con mucho sabor.

Salió una buena cantidad que congela muy bien. Así que sin más preámbulos vamos al lío.




Ingredientes

1 vaso pequeño de aceite de oliva
1 cebolla mediana picada fina
1 pechuga de pollo cocida del puchero picada
las hojas de una mata de hierbabuena picadas
pimienta negra molida
1/2 litro de caldo de puchero o cualquier caldo de ave, preferiblemente casero
hemos usado el caldo de pollo con pollo que hicimos hace unos días
harina la que admita
sal
pan rallado por nosotros
2 huevos batidos
aceite de oliva para freír


En una sartén amplia y de fondo grueso ponemos el aceite y pochamos la cebolla, luego añadimos el pollo y la hierbabuena, la pimienta y la sal.

Dejamos unos minutos a fuego lento y añadimos todo el caldo. Cuando comience a hervir le vamos agregando harina mientras movemos con una cuchara de madera. Hasta que la masa se despegue totalmente de la sartén. Probamos de sal.

Ponemos la masa en una fuerte y dejamos que se enfríe tapada con un film transparente para que no cree costra.

Luego hacemos la croquetas. Hoy hemos usado otro método que nos gusta mucho y que aprendimos de el gran chef José Andrés:
Enharinamos ligeramente la superficie de trabajo.
Cortamos la masa en tiras que hacemos rodar sobre la harina para que se redondee, luego cortamos con el cuchillo del tamaños de croquetas.

Ahora pasamos por huevo batido y luego por pan rallado que hemos hecho en nuestra picadora.
Nos queda freírlas en aceite caliente en tandas de 4-5 cada vez.



La masa es más rápida de hacer que una clásica bechamel y el formado de las croquetas es mucho más rápido que con cucharas, así que hemos ganado mucho tiempo y no hemos perdido nada de sabor. ¿Merece o no merece la pena intentarlo?. Pues nada, habrá que remangarse y meterse en faena.


sábado, 27 de noviembre de 2010

Pizza de jamón serrano y champiñones


A última hora hago esta pizza que llega calentita. Los domingos solemos almorzar una pizza, el viernes empiezo a ver cómo va a ser, últimamente usamos la misma masa y lo que cambiamos es la cobertura.

Y no es la primera de jamón serrano que hago pero sí de esta forma. Con ella me quiero presentar al concurso de María de "María en esencia" y patrocinado por interjamón, un concurso con sabor español y a gloria bendita.

Nos hemos decidido por nuestra masa querida, con harina de garbanzos, que cubrimos sin tomate y en tres tiempos. Primero la metemos sin nada, sólo con aceite, luego a media cocción cubrimos con unos champiñones a los que le hemos retirado el agua y al salir le ponemos el jamón que no necesita salvo el calor que desprende la pizza.Vamos a lío.

Ingredientes masa

200 g harina de fuerza
50 g harina de garbanzos
1'5 cucharaditas de sal
1 cucharadita de jarabe de malta (o azúcar, o miel)
2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
1/2 cubo de levadura de panadero
agua

Ingredientes para la cobertura

100 g de jamón serrano en lonchas finas
200 g de champiñones laminados
1 cebolla tierna picada
orégano seco
chorro de aceite de oliva virgen extra
125 g de mozzarella




Para la masa en un bol grande ponemos las harinas y hacemos un agujero en medio donde metemos la levadura, que vamos diluyendo en agua tibia, vamos uniendo estos ingredientes y agregando más agua a medida que necesitemos. Vamos agregando el resto de los ingredientes de la masa y pasaremos a una superficie ligeramente enharinada para amasar hasta conseguir una bola homogénea. Si queréis podéis consultar un vídeo que hicimos en otra ocasión.

Dejamos reposar la masa hasta que doble su volumen y preferiblemente en un lugar templado.

En aceite de oliva rehogamos la cebolla tierna y los champiñones con un poco de sal durante unos 5 minutos para que pierdan su agua, al final ponemos un poco de orégano seco. Apartamos y dejamos enfriar.

Amasamos de nuevo brevemente la masa y extendemos con un rodillo sobre la superficie enharinada. Pasamos a una placa vuelta del revés y enaceitada.

Pintamos con aceite. Pinchamos con un tenedor la masa y metemos en el horno a tope durante unos 6 minutos, hasta que la masa se haya hecho un poco y ya esté firme, aunque no dorada.

Sacamos, cuidando de cerrar rápido el horno y no perder calor. Cubrimos con nuestro champiñones con cebolla, también desmenuzamos nuestra bola de mozzarella con la manos en trozos pequeños.

Volvemos a hornear hasta que esté dorada.

Sacamos e inmendiatamente colocamos unas lonchas de jamón serrano bien finas y dejamos dos minutos que cojan el calor de la pizza mientras el queso se asienta. Un chorro de aceite de oliva crudo en espiral y lista para comer.

Espero que os guste, hemos intentado cuidar los tiempos para que todo quede en su punto y el resultado ha sido muy bueno.


Bica

Seguimos por el norte. Del País Vasco a Galicia, menudo viajecito nos estamos pegando.

A pesar de tener ascendencia gallega hasta no hace mucho no sabía qué era una bica, me compré un bizcocho que me dejó encantado, luego he ido, virtualmente, paladeando muchas de las recetas que van apareciendo en la blogosfera pero no ha sido hasta que he visto la bica de Paula de "Bimba en la cocina" un blog con recetas importantes como ésta, que no me he decidido a hacer una.

De nuevo hago de aprendiz en pasteles y me quedo maravillado de la grandeza de este simple bizcocho. Con estas cantidades salió una bica bien grande, que nos ha durado unos días. Muy sabroso, con su capita crujiente y con aroma de canela por encima.



Ingredientes

4 huevos a temperatura ambiente
400 g de azúcar
200 ml de nata 35%
200 g de mantequilla a temperatura ambiente
200 g de harina de maíz
200 g de harina de todo uso
1 sobre de levadura Royal
azúcar y canela mezclados para cubrir

Batimos los huevos junto con el azúcar hasta espumosos usando las varillas eléctricas, añadimos la nata hasta incorporar bien. Posteriormente, incorporamos la mantequilla.

Añadimos las harinas y la levadura pero ahora mezclamos con la espátula, o con una cuchara de palo, no conviene usar ahora una velocidad alta.

Seguí una de las sugerencias de Paula y en vez de usar un molde específico de pastelería metimos nuestro bizcocho en un pírex enmantequillado, una de las razones de esta elección fue las dimensiones del bizcocho.

Mezclé unas cucharadas de azúcar con un poco de canela y cubrí el bizcocho.

Metemos en el horno a 180º durante 45 minutos, arriba y abajo.

El resultado ha sido increíble. No podía creerme que a este aprendiz de pasteles, que soy yo, le hubiera salido algo tan rico. Y lo voy a repetir tan rápido como pueda porque aún no me lo creo del todo.

jueves, 25 de noviembre de 2010

Bacalao al pil pil



Con esta receta quiero presentarme al I Concurso Internacional de Mantecado de Estepa que José Manuel de "Asopaipas" ha presentado junto con Polvorones y Mantecados San Enrique.
Deciros que me presento un poco tarde porque no conseguía ninguna receta que me convenciera hasta que le pregunté a mi mujer y me sugirió esta evidencia (los ingredientes debían ser aceite de oliva y/o manteca de cerdo), cómo no había caído antes, qué haría sin ella.

I Concurso Internacional Mantecado de Estepa (Del 8 al 30 de Noviembre)

Esta es sin duda uno de los grandes platos de mi vida.
Mi padre trabajó durante la mayor parte de su vida en un restaurante de cocina vasca y para mí esos platos eran el no va más de la gastronomía. Durante mi infancia el bacalao al pil pil, la merluza en salsa verde, las cocochas, eran lo mejor, no escuché nada de cocina francesa.
En Cádiz había muchos restaurantes de cocina vasca e incluso hoy se encuentran estos platos en los menús como recuerdo de la importancia que tuvo y tiene en el buen comer del pueblo gaditano.

Hacia bastante tiempo que no hacía este plato pero lo tenía muy bien redactado en mi ordenador, lo he hecho en un visto y no visto, como si llevara haciéndolo toda la vida. Seguro que podría mejorarlo pero ha sido un placer recordarlo y con tan poco esfuerzo.

Sobre el plato en concreto es pura magia, hacer un pil pil en condiciones siempre ha sido un gran truco de cocinero, conseguir esa emulsión era todo un arte. Una salsa que se conseguía tras mover concienzudamente la cazuela. De aceite y bacalao salía algo realmente distinto, una salsa maravillosa.




Ingredientes para los dos de siempre

2 lomos de bacalao desalados
200 ml de aceite de oliva 0'4º
2 ajitos en láminas
unos aritos de guindilla

En una cazuela de barro con el aceite doramos los ajos junto con los aros de guindilla. Cuando estén dorados sacamos el ajo y la guindilla aparte e incorporamos el bacalao, bien seco: dos minutos por la parte de la piel y dos minutos por la otra.

Ahora retiramos la cazuela del fuego y dejamos que el aceite temple con el bacalao dentro aún.

Sacamos el bacalao que reservamos al calor. Sacamos el aceite dejando unas 4 cucharadas y vamos incorporándolo poco a poco mientras vamos ligando con ayuda de un colador. Veréis que liga muy rápidamente. Muy importante mantener una temperatura suave, sin que llegue a hervir, lo que hago es mantenerlo fuera del fuego y lo voy acercando al fuego bajo y retirándolo para que la cazuela no coja mucha temperatura.

Cuando tengamos incorporado todo el aceite y la salsa bien ligada volvemos a meter los lomos de bacalao para que recuperen algo de temperatura y cubrimos con los ajitos y con la guindilla (hoy no la hemos puesto). Voilà.

Lo del colador es un truco más moderno, tradicionalmente se ligaba moviendo la cazuela, también he visto cocineros que ligaban la salsa montándola con unas varillas de repostería. El resultado sigue siendo pura magia.

martes, 23 de noviembre de 2010

Caldo de pollo con pollo


No voy a descubrir nada nuevo, simplemente he hecho un caldo de pollo casero. Un caldo suave que nos servirá de base para otras preparaciones.

Hasta ahora teníamos publicado el puchero gaditano y también una etiqueta con el nombre de "el libro del puchero" donde teníamos algunas preparaciones en la que usabámos este caldo. Ahora ponemos otro caldo, un caldo suave de ave a nuestra manera. Los personajes del cuento son: carnes, huesos, verduras, hierbas y especias. Pero cualquiera de nosotros puede elegir los actores.

También os he querido dejar un enlace con wikipedia en el que vemos que el caldo de pollo está en muchos países, todos son distintos pero con muchas similitudes. Además creo que en estas fechas y con esos resfriados que estamos cogiendo este medicamento natural nos hará mucho bien.

Y eso de con pollo ¿porqué?. Pues porque para hacer un caldo de éstos a veces se usan carcasas o despojos de pollo pero hoy hemos usado un pollo entero también. He sacado mi olla alta de 11 litros, aún me impresiona cuando la saco, y hemos empezado a meterle cosas.

Ingredientes

2 carcasas de pollo un poco rotas con el machete.
1 pollo limpio y entero
1 cebolla partida por la mitad con un clavo clavado cada una
1 rama de apio
1 puerro
1 chirivía
1 nabo
1 nabicol
6 zanahorias
2 patatas grandes
unos granos de pimienta
una ramita de perejil
1 hoja de laurel
agua hasta cubrir
un chorrito de aceite de oliva virgen extra
sal

Vamos metiendo en la olla todos los ingredientes (verduras peladas) y vamos desespumando. Cocemos lento durante dos horas.
Luego sacamos nuestro pollo que vamos a deshuesar para usarlo en otras preparaciones. Una de ellas serán una nuevas croquetas de pollo.
Sacamos las verduras que nos servirán para un puré para la cena de mis niños.
El caldo, lo más preciado nos servirá para una sopa para hoy, para las croquetas y para guardar para otras sopas. Si queremos, lo metemos en la nevera y cuando se haya enfriado lo degrasamos.

El más sencillo de los ejemplos: Nuestro caldo en una ollita más pequeña, con arroz, cuando esté casi listo añadir una patata y una zanahoria un cubos, pollo deshilachado y una mata de hierbabuena. Probar de sal.




Una forma de combatir los resfriados de la manera más sana.


sábado, 20 de noviembre de 2010

Croquetas de champis y gambas



Con estas croquetitas me presento al concurso de Elena de "Elena en su Salsa" junto con Més del Passeig y Pasteles de Barcelona sobre Tapas, Pinchos y Montaditos. Espero que os gusten.


mesdelpasseig


Unas croquetas de bechamel con una mezcla que nunca había oído pero que descubrí en un libro dedicado al tema de las tapas y que me compré no hace mucho tiempo:" 1450 recetas de tapas" de Mikel Iribarren, aún no lo he amortizado porque es sólo la segunda receta que hago, pero tiene posibilidades.

La receta que os presento nos quedó muy jugosa, se fundía en la boca; sus sabores suaves y delicados, se percibía claramente el aroma de nuez moscada.



Ingredientes

unas cucharadas de aceite de oliva virgen extra
160 g de gambas peladas en trozos pequeños
300 g de champiñones también en trozos pequeños

1 cebolla muy picada
80 g de mantequilla
80 g de harina de fuerza
800 g de leche
pizca de sal
nuez moscada

2 huevos
pan rallado
aceite de oliva para freír


En una sartén con un poco de aceite de oliva freímos los champis con las gambas hasta que estén hechos y hayan perdido su líquido.

En otra sartén freímos en la mantequilla la cebolla sin que coja color, luego incorporamos la harina y dejamos hasta empezar a dorar, luego incorporamos la leche caliente y poco a poco, sin parar de remover. Salamos y añadimos nuez moscada rallada.

Incorporamos la mezcla de gambas y cocemos todo hasta que espese.

Luego pasamos a una fuente amplia, cubrimos con papel transparente y llevamos al frigorífico para que se enfríe bien.

Formamos croquetas del tamaño de una cucharada y pasamos por huevo batido y pan rallado casero (suelo hacerlo en la picadora).

Freímos en una sartén pequeña con abundante aceite de oliva en tandas de cuatro.

Buen provecho.

viernes, 19 de noviembre de 2010

Ensalada de patatas, manzanas y rúcula


Una ensalada con mucho sabor. Los ingredientes, con el potente queso feta, y la vinagreta, con su punto de miel, combinan de una forma fantástica. En la boca es una explosión de sabor.

La hice ayer y la quiero publicar prontito que luego me vienen ideas nuevas y no es la primera ensalada que luego con el tiempo "se enfría" y termino sin publicar. Así que ahí os la dejo para que la comáis cuanto antes.

Ingredientes para los dos de siempre

3 patatas medianas peladas y cortadas en rodajas gruesas
1 manzana pelada en cubos y mezclada con una cucharada de limón
1 puñado de rúcula
1/2 granada, desgranada
80 gr de feta en dados pequeños

vinagreta

1 cucharada de vinagre de vino tinto
una pizca de sal
3 cucharadas de aceite de oliva virgen
1/2 cucharadita de semilla de hinojo
1 cucharadita de miel

Cocemos la patata hasta blanda. Reservamos y dejamos enfriar, unimos en un bol con cuidado todos los ingredientes. Luego lo ponemos en una ensaladera.

Unimos los ingredientes de la vinagreta en un tarrito con tapadera y emulsionamos como si fuera una coctelera, lo normal es pegarse un cantecito mientras.

En la ensaladera lo colocamos todo bonito y lo regamos con nuestra alegre vinagreta.


jueves, 18 de noviembre de 2010

Roscos de anís al horno



Esta es una de esas recetas geniales que publica nuestra amiga Lola de "Lola en la cocina", uno de nuestros blogs preferidos. Una de esas recetas que puedes leer pero hasta que no la haces no te lo crees. El resultado es genial, una delicada rosquilla hecha al horno, ligera y muy fácil de hacer.

Así que de nuevo triunfamos con una receta de Lola. Mucho menos calórica que las fritas que recuerda un poco al polvorón, que se te deshace en la boca, pero no se hace nada pesada.




Ingredientes para 26 rosquillas

1/2 kilo de harina de todo uso
1 vaso de agua de aceite de oliva suave
1 rajita de piel de limón
1/2 vaso de agua de anís seco
azúcar para rebozar


Calentamos el aceite con la piel de limón en un cazo pequeño. Ponemos la harina en un cuenco que aguante bien la temperatura. Cuando la piel se vaya friendo la retiramos y echamos el aceite caliente sobre la harina mientras vamos moviendo con una cuchara de madera intentando que el aceite la impregne toda. En poco tiempo veremos cómo la harina ha cambiado de color y ha absorbido todo el aceite.
Ahora añadimos el anís e intentamos, moviendo con la cuchara, conseguir una masa homogénea. En cuanto la masa se deje amasamos un poco hasta conseguir una masa lisa.

Hacemos bolitas con el tamaño de una nuez que ponemos sobre papel vegetal en la placa del horno. Hacemos un agujerito en el centro de la nuez algo aplanada. Puedes usar el mango de una cuchara o un dedo índice limpio.

Nos queda meterlas en el horno a 180º precalentado y dejarlas hasta que se doren. Las mías quedaron algo blanquitas pero muy muy ricas. Las saqué a los 35 minutos.

Luego, aún en caliente las embadurnamos en azúcar.




Una receta excelente fácil y rápida. Os la recomiendo.


martes, 16 de noviembre de 2010

Pizza de setas al ajillo



Esta pizza la he hecho muchas veces pero la foto siempre se me había resistido, nunca me había gustado lo suficiente como para enseñárosla.

Pero con las fotos de ayer me doy por satisfecho y por fin publico mi pizza de setas. Por el camino he ido haciendo cambios, a veces simplificando y otras complicándome la vida.

Os dejo mi versión de ayer, calentita, calentita.


los ingredientes de la masa:

200 gr de harina de fuerza
50 gr de harina de garbanzos
1/2 cubo de levadura fresca
1 cucharadita de jarabe de malta
1 cucharadita y media de sal
1 chorro de aceite de oliva virgen extra
agua
De esta cantidad dividimos 250 g de masa, que amasamos junto con 1 ajo majado y 1/2 cucharadita de tomillo seco. Esta será la masa de la pizza, el resto 160 g serán para los soles de mis niños.

Sobre cómo amasar os dejo nuestro vídeo, que tenemos colgado en youtube.



Preparamos el relleno salteando en un poco de mantequilla unos 300 g de setas, limpias y troceadas, con dos ajitos picados y un poco de perejil. Que pierdan su agua, unos 5 minutos. Salar y apartar.

Después de subir nuestra masa, la amasamos brevemente y la extendemos con un rodillo sobre la placa del horno enaceitada. Luego cubrimos con unas cucharadas de salsa de tomate espesa, dejando un borde libre y metemos en el horno a tope. Lo dejo 5 minutos, que es la mitad de lo que mi horno tarda en hacer la pizza, pero bien es verdad que cada horno tiene su temperatura tope, los habrá que la harán en menos tiempo y otros que tarden más.


Pues a mitad de cocción la sacamos, cerramos el horno para que no se nos vaya el calorcito, y la cubrimos con las setas, con esos ajitos que quedan en la sartén y con la mozzarella desmenuzada cubriendo los huecos entre las setas.

Seguimos con la mitad de la cocción y al salir espolvoreamos con perejil picado.
Ahora esperé dos minutos, justo el tiempo para que se asiente el queso, realice mi sesión fotográfica y mi mujer no me recuerde que se me está enfriando, con lo bien que huele.


Esta fue un solete que les hice a los niños, cuando lo hice yo pensaba que hacía una estrella pero cuando lo vieron dijeron que era un sol así que no seré yo el que les discuta.

Ahora quiero dedicaros a todos los que pasáis por aquí un regalo que me ha hecho Alicia, de las recetas de maitasun. Compartirlo con todos es un placer. Gracias.


sábado, 13 de noviembre de 2010

Spaguetti con salsa de gorgonzola y langostinos



Resulta que tras comernos esos T-bones seguimos encadenando ideas. Esta vez nos había quedado la mitad de la cuña de gorgonzola dulce que nos habíamos comprado, uno de los libros recetas de pasta que había sacado de la biblioteca era realmente bueno,"El libro de la pasta de Canal Cocina" de Fabio Morisi, el resto era comprar hierbabuena fresca y descongelar unos langostinos.

La receta prometía y al final convenció.





Ingredientes para dos:

200 g de spaguetti
un poco de mantequilla
1/2 cebolla tierna picada
8o g de gorgonzola dulce
60 g de nata
un chorrito de aceite de oliva virgen
12 langostinos medianos
8 hojas de hierbabuena fresca más dos ramitas para decorar
sal y pimienta


Cocemos la pasta en abundante agua con sal. Por cada 100 g de pasta un litro de agua y 10 g de sal.

Mientras en una sartén sofreímos la cebolla tierna en la mantequilla sin que llegue a coger color, luego añadimos la nata y queso, dejamos cocer un poco, sólo para integrar y retiramos.

En otra sartén, salteamos en el aceite los langostinos y las hojas de hierbabuena. Salpimentamos y le añadimos la salsa de queso.

Escurrimos la pasta y lo salteamos todo junto. Al plato y decorar con más hierbabuena.

Lo ideal hubiera sido pelar los langostinos pero a veces pienso que el tacto es un sentido muy olvidado en la cocina debido a las costumbres francesas, quizás habría que acercarse más a la costumbres africanas...eso y que había confianza, estábamos en casa, y ahora entre amigos.

jueves, 11 de noviembre de 2010

T-bone con salsa de gorgonzola


A veces te levantas por la mañana y no sabes que vas a poner de comer, que si no tengo mucho tiempo, que tengo que ir a demasiados sitios y no me va a dar tiempo, ... y no terminas de decidirte.
Tomé una primera decisión: unos spaguettis con salsa de gorgonzola, que encontré en uno de los libros que había sacado de la biblioteca (saqué 3 libros de pastas), visita obligada pues caducaban los libros de los niños.
Después de ir a la biblioteca tuve que ir al Carrefour, el martes no es un buen día para el pescado, y me fui para la carne y vi estos T-bone de cerdo, yo no conocía este corte y me pareció interesante, una chuleta junto a el solomillo, os dejo un enlace con wikipedia aquí para saber qué es un T-bone. Leo que es uno de lo clásicos en la barbacoas norteamericas.
Así que volví a cambiar mi receta y decidí estos filetes a la plancha con una salsa de gorgonzola y algo de pasta para acompañar.
Ya con la comida pensada uno anda más tranquilo y terminé la mañana de aquí para allá, como siempre.
Así salió la receta del martes y quedó muy rica.



Ingredientes para los dos de siempre:

2 T-bones de cerdo
aceite de oliva virgen extra
sal maldon

80 g de gorgonzola dulce
60 ml de nata
25 mantequilla
sal fina
pimienta molida

pasta corta para acompañar

Usé unos "radiatori", pasta divertida que imitan radiadores y que ha triunfado con mis niños.

Cocemos la pasta con sal y la mantenemos caliente.

Pongo la plancha a tope y embadurno en aceite los filetes. Tiramos a la plancha y sellamos por los dos lados, luego bajo el fuego y mantenemos lento unos cuantos minutos (no miré el reloj pero se habla de unos 8 por cada lado), depende de tu gusto.

Mientras unimos los ingredientes de la salsa en un pequeño recipiente que pueda ir al micro y derretimos, mezclando bien los ingredientes y probando de sal y pimienta. Podemos modificar el espesor de la salsa aumentado la nata.

Emplatamos. Ponemos nuestra carne que salamos con maldon, acompañamos con la pasta y salseamos. El resto de la salsa en salsera que se acabará toda.

martes, 9 de noviembre de 2010

Arroz seco con cerdo, setas y romero

Con esta receta quiero presentarme al concurso que nos traen Aceites de oliva virgen extra "iloveaceite" y "la Cocina de Javi" sobre setas y aceite de oliva. Tenéis hasta el 18 de noviembre para participar.


A mis suegros les encanta la paella y disfrutan cuando de higos a brevas me ofrezco para hacer una. Esta vez recordé una que he hecho varias veces de lomo y setas, aunque esta vez no tenía libro ni guía, así que sin GPS fui orientándome, recordando y reelaborando esta paellita tan rica.

Ingredientes para 6 personas:

aceite de oliva virgen extra
sal
1/2 kilo de lomo de cerdo cortado en cubos de 2 x 2 cm, más o menos
1/2 kilo de costilla de cerdo troceada pequeña
1 cabeza de ajo entera con un corte alrededor
2 cebollas tiernas en rodajas gruesas
1 pimiento rojo roto con las manos a pellizcos
1 bandeja de setas shiitake
1 tomate grande y maduro rallado
arroz bomba, doce puñados
4 ramitas de romero





En la paella con aceite doramos el lomo cortado y salado junto la cabeza de ajos. Cuando esté dorado apartamos el lomo e incorporamos las costilla que doramos también. Unimos el lomo y agregamos la cebolleta, y el pimiento rojo, luego el tomate rallado.

Despejamos una parte de la paella, puede ser un lado o el centro y allí salteamos las setas que luego apartamos.


Añadimos agua, bastante porque debe cocer 30 minutos y al final debe quedar el líquido a la altura de los tornillos de la paella. Podemos añadir más agua si es necesario.

Vamos probando de sal, agregamos el arroz y las setas reservadas, mezclamos. Miramos el reloj, hoy el arroz lo hemos apartado a los 20 minutos justos.

Ponemos a fuego alto hasta burbujee claramente, es estos primeros momentos, podremos mover el arroz.

Luego bajaremos el fuego y dejamos cocer hasta los 2o minutos. Probamos de sal. Si vemos que vamos a necesitar agua es posible echar más pero poco a poco, no hay que cortar nunca la cocción.


Luego llevamos a la mesa tapado con un paño limpio y dejo que se asiente unos dos minutos, es difícil porque en estos momentos la presión familiar es grande.
Acompañamos con limón.



Quedamos encantadísimos con la paella, con sabor otoñal. El aroma de romero impregnó toda la casa.

sábado, 6 de noviembre de 2010

Emblemas de Cádiz.3



Ha sido un viaje corto a Cádiz, como va siendo habitual os dejo algo de mi tierra para que las conozcáis mejor. Para aquellos a los que les pueda interesar hemos publicados dos series de "emblemas" anteriormente: Emblemas de Cádiz y Emblemas de Cádiz.2.




Este mes tenemos en el centro de Cádiz una exposición de Auguste Rodin, ya había fotografiado a "El pensador" en París, en Palma de Mallorca y ahora me lo encuentro en Cádiz, en medio de la calle Ancha, fotografiarlo ha sido un placer.

Os dejo también una foto de la Catedral, un monumento junto al que me crié pero al que no pude entrar hasta que fui algo mayorcito. En Cádiz cuando algo dura mucho se dice que "va a durar más que la obra de la catedral" que empezó a construirse en 1722 y terminó en 1838, empezó siendo barroca y terminó barroca, rococó y neoclásica.



Nos dimos un viajecito al Puerto de Santa María donde estuvimos con nuestros amigos Antonio, Elena y sus niños, con los que fuimos al mejor cocedero de mariscos, a "Romerijo". Nos compramos los mariscos en Romerijo, el "pescaíto" frito enfrente y nos sentamos en la terraza con nuestros papelones, allí pedimos las bebidas y una ensaladilla de mariscos que estaba bien rica.




Para terminar una foto de los churros de Cádiz que hemos desayunado en "La guapa" y en "La marina" a los niños les encantaron y tuvimos que repetir.


jueves, 4 de noviembre de 2010

Fettuccine frescos con crema de queso


El sábado nos llovía a mares y no hubo paseo ni parque para los niños así que volvimos a sacar nuestra máquina de pasta. A mi niña le prometí unos raviolis y estaba muy ilusionada.

Hice la masa (os dejo un enlace con otra entrada con pasta fresca) y la dejé descansar en el frigo, luego hicimos tiras y rellenamos con una mezcla de mozzarella, parmesano y un pelín de albahaca picada, al gusto de mi hija.

Hacer los ravioles les encantó, aunque las tiras las estiramos con la máquina el ravioli lo hicimos a mano, unos raviolis de 5 x 5 cm, más o menos.




Para los papás ya me cansé e intenté coger una vía rápida así que hicimos estos fettuccine con una salsa de quesos.

En un cazo unimos mozzarela desmenuzada, un poco de parmesano rallado, un poco de queso de cabra y una cuñita de roquefort. Añadimos nata, algo de sal y un poco de pimienta recién rallada.
Para controlar el espesor y concentración de la salsa añadí más nata. Solo fundir y probar.

Cocimos la pasta y acompañamos con esta salsa. Por encima, algo de albahaca picada y unas hojitas para decorar.



Una foto de los raviolis, luego ya no hubo tiempo de hacerles más fotos.

martes, 2 de noviembre de 2010

Salmonetes a la plancha



Sobre la cabecera decir que ahora estoy unos días de vacaciones y aunque no hace tan buen tiempo sí quiero recuperar el espíritu de estos días de verano en el hice esta foto en el parque acuático.

Una foto refrescante, un deseo de pasárnoslo bien y recordar lo maravilloso que fue el verano antes de internarnos en el otoño, que también tiene su cosa.

Para disfrutar de nuestra receta de hoy no es necesario tener ningún conocimiento de cocina, solo hay que tener ganas de comer bien.

Hemos comprado unos salmonetes en el mercado del Olivar, en Palma de Mallorca, y tras hablar con la pescadera decido que a este pescado tan fresco no merece la pena enmascararle sabores.




Así que cogemos estos salmonetes limpios, salamos ligeramente, embadurnamos de aceite de oliva y tiramos a la plancha caliente.

"Unos pocos minutos, cuando veas que por los lados empieza a hacerse, les das la vuelta y tener muy poco por este lado, casi solo para sellar". Estos fueron los consejos de mis pescadera.

"¿Salsa?, no hombre, estos hay que comerlos fritos o a la plancha, si acaso un picadillo de ajo y perejil muy picaditos, mezclados con aceite de oliva."

¡Cuánta razón!, cuando sacamos nuestros pescados de la plancha los regamos con este aceite.



Y como acompañamiento nuestras papas aliñás le vinieron de lujo.