Tenemos otra receta de pollo con leche de coco pero bastante diferente, ésta es de éxito seguro, sin riesgos si te gusta el picante, que si quieres puedes reducir o eliminar.
La hemos rescatado de un libro del que ya hemos sacado otras recetas: "Wok" de Sunil Vijayakar. Como hemos dicho contiene recetas orientales fáciles y atractivas. La única pega de la receta que puede ser una virtud es que necesita maceración. Uno de esos días que cocinamos menos nos podemos dedicar a preparar el pollo macerado, la recompensa vendrá al otro día en el que encontrarás un pollo muy aromático y en poco tiempo.
Ingredientes para 4:
- 1,6 kg de muslitos de pollo, a ser posible grandes
Maceración:
- 1 cucharada de semillas de cardamomo machacadas en el mortero.
- 1 cucharada de raíz de jengibre fresca rallada
- 2 cucharaditas de ajo rallado
- 7 cucharadas de yogur natural (sin azúcar)
- 2 guindillas verdes sin semillas y troceadas
- 1 cucharadita de comino molido
- 1 cucharadita de cilantro molido
- 1 cucharadita de cúrcuma
- 1 lima. Zumo y su ralladura
Para terminar:
- Unas cucharadas de aceite de girasol
- 400 ml de leche de coco sin endulzar
- 4 guindillas verdes grandes, partidas por la mitad
- Unas ramitas de cilantro
- sal y pimienta negra molida
- yogur natural (optativo, aunque no lo puse)
Untamos bien los pollos con la maceración, sazonamos y dejamos en un cuenco tapado con un film en la nevera un mínimo de 6 horas aunque mejor de un día para otro.
Calentamos el aceite en un wok o sartén grande. Vamos incorporando el pollo en tandas para dorarlo, reservando el líquido de maceración.
Cuando esté dorado reunimos todos los muslitos y añadimos la leche de coco, el líquido de maceración, las guindillas verdes cortadas por la mitad. Llevamos a ebullición.
Bajamos el fuego y cocemos durante 30- 35 minutos destapado. Probamos de sal.
Servimos y decoramos con cilantro roto con las manos. Podemos añadir un poco de yogur para dar un toque de color.
Nota: Hemos hecho esta receta en varias ocasiones y puedes usar cayena molida en vez de guindillas verdes, así podrás dosificar tu cantidad óptima de picante.
Esta última vez usamos unas guindillas verdes de Almería que parecía que no picaban pero al final tras la maceración sí que picó, tolerable y fresco y nos lo comimos bien a gusto pero no todo el mundo, por aquí, puede disfrutarlo.
Otras veces he sustituído las cantidades de comino y cilantro por nuestro garam masala casero.
Alguna vez la he hecho en Navidades, nada tradicional pero muy rico.
Me encanta, me encanta. Es que estos platos son los míos con sabores orientales y especiados. Precisamente hoy preparé un pollo con jengibre en el wok que publicaré la próxima semana.
ResponderEliminarVoy a buscar ese libro porque veo que tiene recetas fantásticas.
Bicos
Me entusiasma. Genial receta. El yogur, (o nata líquida) suaviza bastante el picor.
ResponderEliminarTambién es frecuente en estos curries de pollo, acompañar de fruta, (dentro de la receta, como pasas, orejones, o trozos de mango) o fuera de la receta, en un platito, por si alguien sufre con el picante, lo que más lo calma es el dulce.
Muy muy rica esta receta, aunque yo hago otro curri diferente, este me le tengo que preparar, yo también con mis mezclas caseras de curry... como tu.
Un beso.
Hace tiempo que no hago nada de cocina oriental y ya me está apeteciendo, sobre todo la cocina india me encanta. Estos muslicos los tengo que probar!
ResponderEliminarUn beso.
Paisano, estupenda esta receta, que te copio por supuesto, pero tengo una de pollo al curry en mi blog que me gustaria que la hicieras, seguro que la bordas tambien, un beso
ResponderEliminarDesde luego que vendré a tu blog a buscar esta receta el dia que me ponga en serio con las especias exóticas. Aún no he empezado y mira me han traído un montón de la India... Esa guindilla verde le queda genial.
ResponderEliminarUn abrazo.
Un pedazo de receta, si señor... adoro los curries y siempre me anoto las recetas que veo. Esta va al saco.
ResponderEliminarAyer hice un curry de pollo también con leche de coco y orejones.
Me llevo tu receta del garam casero.
Gracias. Un placer venir por aquí.
Abrazos.
Rakelilla, veo que coincidimos en lo oriental.
ResponderEliminarVeremos tu pollo, seguro que bien rico.
Un saludo.
Paco, como ves de vez en cuando hacemos incursiones orientales.
ResponderEliminarEstos muslitos picantitos, ¿podríamos ponerle un raita de pepino y menta? eso sí que refrescaría.
Un saludo.
Lolah, son facilones e ideales para un día especial.
ResponderEliminarUn saludo.
Mamen, miraté esa receta tuya, seguro que está riquísima.
ResponderEliminarUn abrazo.
Anna, aquí estaré esperando a que te decidas, seguro que te sale algo buenísimo y lo fotografías igual de bien.
ResponderEliminarUn abrazo.
Adi, parece que a todos nos encantan los currys.
ResponderEliminarEste garam es muy facilón y queda que ni pintada.
Un gran abrazo.
Hola Jantonio:
ResponderEliminarVaya recetas tan buenas. Para componer un menú delicioso. Me alegro te gusten las galletas y es un nuevo mundo en el que explorar y experimentar. Besos mil y gracias
Genial lo de la menta y el pepino, me parece super refrescante, gran guarnición y así podemos darle un poquito más de picante a la salsa.
ResponderEliminarUn abrazo JANTONIO
Tartasacher, gracias. A ver si hacemos galletas ricas.
ResponderEliminarUn abrazo.
Paco solemos usar mucho la raita de pepino y menta, el yogur es la salsa India que más nos gusta.
ResponderEliminarA ver si pongo algún aperitivo y ponemos la salsa.
Un abrazo.