Tirópites / Empanadillas de queso

Unas pequeñas empanadillas crujientes hechas con masa filo. Son griegas y están rellenas de una mezcla de queso feta y otro más suave, huevo y alguna hierba. Conozco varias variaciones pero esta vez hemos buscado en uno de mis blogs más queridos, en La cocina de Babel que sabe mucho de cocina internacional, eso sin hablar de la simpatía que reparte nuestra amiga Juana.

El proceso de hacerlas es muy divertido y hasta le interesó a mi niño de cuatro años que me repetía "es muy fácil, primero para un lado y luego para el otro", y a mí se me escuchaba decir "cuidado Rubén, que esta pasta es muy delicada". Nos lo pasamos bien.

Ingredientes

pasta filo, un paquete aunque no lo gastamos entero

200 gr de queso feta

100 gr de mozzarella aunque puede ser un requesón o ricotta

1 huevo

hierbabuena picada, perejil o tomillo frescos
pimienta recién molida

aceite de oliva para pintar, aunque hay versiones con mantequilla o una mezcla de aceite y mantequilla.

Para trabajar con la masa filo debemos impedir que se nos seque así que cogeremos dos paños limpios y humedecidos y al abrir nuestro paquete pondremos las láminas entre los dos paños mientras estamos trabajando y rellenando.

Sacamos una lámina de entre los paños, ponemos en una superficie bien limpia y seca colocándola con la parte estrecha junto a nosotros, en vertical, pintamos con aceite de oliva, cortamos por la mitad a lo largo.

Doblamos cada media a lo largo. Ahora nos quedarán 2 tiras finas de cada lámina. En la esquina inferior derecha ponemos una cucharadita colmada del relleno. Hacemos nuestro primer triángulo, y luego vamos haciendo triángulos, subiendo por la tira de pasta.

Cuando lo hagáis la primera vez veréis que es bastante fácil y bien divertido.

Luego colocamos en la placa de horno con papel vegetal y volvemos a pintar de aceite por encima y ponemos algunas semillas de sésamo.

Y metemos en el horno a 180º hasta que se dore.

Al salir del horno pusimos en un papel absorbente para eliminar el aceite sobrante.

Nos sobraron y por la noche pudimos calentar en el micro en unos segundos.

Espero que os guste, y que utilicéis esta forma de hacer empanadillas porque al principio puede parecer complicado pero la segunda vez compensa el esfuerzo. Ya me contaréis.





Un besote.